Jose Vasconcelos

Hola, este blog fue creado con la finalidad de proporcionar información acerca de algunas de las actividades e importancia que tuvo José Vasconcelos en nuestro país, por este medio publicaremos escritos, pequeños reportajes e investigaciones acerca de algunas actividades que desempeñó en su vida, incluyendo importantes aportaciones enfocadas a el mejoramiento de la educacion en nuestro pais. Esperamos que este blog les sea de mucha ayuda y puedan tener una mejor informacion acerca del tema.


martes, 14 de diciembre de 2010

Vida y Obra





Era una figura intelectual que se comprometió con la política, dando con ello a un hombre dialéctico y provocador, sus máximas aportaciones a este país fueron la educación, la cultura y la filosofía. El creyó firmemente en la educación como el principal instrumento liberador del pueblo; la educación libera de la ignorancia a un país, para sobresalir entre sus generaciones. Fue un promotor de educación aún con sus diferencias sociales y transmitió una mística para cumplir una cierta misión en México. Vasconcelos fue un hombre muy culto e hizo el primer análisis de una revolución educativa. Eso si diferenció el modelo anglosajón del modelo latino en el campo de la educación y esto se ve reflejado en sus obras.
La percepción de Vasconcelos sobre Estados Unidos y su relación con México fue una de las más influyentes durante el México posrevolucionario. Su narrativa sigue el curso de los eventos durante el Porfiriato, la revolución y sus consecuencias, de las que él mismo se convertiría en protagonista, primero y en víctima después, cuando perdió las elecciones presidenciales en 1929, dando con ello que los generales en el poder le impusieran el exilio.

La raza, religión y lengua los tres fueron los motivos de los escritos de Vasconcelos a todo lo largo de su vida. Aun cuando reconocía las virtudes del trabajo, observancia de las reglas y adherencia a la gran "familia cristiana" como características positivas de Estados Unidos, consideraba que éstos constituían una amenaza a la misión y el destino de la "raza cósmica". Las ambigüedades reunidas en este concepto forzaron a Vasconcelos a buscar su significado en el pasado, donde podía encontrar los componentes de una civilización distintiva para afirmarla en el presente. México es visto por él como el sitio en el que estos componentes se mezclaron y del que emergería una gran sociedad. La condición para que esto ocurriera era resistir a la absorción del Coloso del Norte, con sus espurias logias masónicas, sus sectas protestantes y su insípida blancura.
En mayo de 1920, regresaba a México tras un destierro de 5 años. Poco después es nombrado por el presidente interino Adolfo de la Huerta, como rector de la Universidad Nacional.
Siendo rector de la Universidad Nacional (del 29 Junio de 1920 al 12 de Octubre de 1921), en el desempeño de este cargo, organizó el ministerio en tres departamentos; Escolar, de Bellas Artes y de Bibliotecas y Archivos; mejoró la Biblioteca Nacional y creo varios repositorios bibliográficos populares edito una serie de clásicos de la literatura universal. El presidente Adolfo de la Huerta, no se equivocó al nombrar Rector de la Universidad de México a Vasconcelos. Siendo al mismo tiempo miembro activo del ateneo de la juventud, en donde se reunían a leer a Platón y a Nietzsche, en la casa del Arquitecto Jesús T. Acevedo, con Antonio Caso, Pedro Enríquez Ureña, Alfonso Reyes, entre otros destacados en las letras nacionales.
Al frente de la Universidad Nacional y del ministerio de Institución Pública, Vasconcelos tenía un concepto muy claro de lo que debía ser la organización y las principales directrices de la educación nacional, se entregó con entusiasmo a perseguir dos grandes metas; el proyecto de ley, las reformas constitucionales que fundamentan el ministerio de educación pública y el proyecto del edificio que cobijara al ministerio de tal manera que a medida que la creación del Misterio de Educación se cristalizaba en leyes, y así en el decreto del edificio que hoy es la Secretaria de Educación Pública también impulsó al mismo tiempo; la educación indígena, la rural, la técnica y la urbana; creó redes de bibliotecas, misiones culturales, escuelas normales y Casas de Pueblo, que convirtió en centros educativos básicos. Fomentó la lectura, editó colecciones de libros de los autores clásicos, apoyó la obra de los primeros muralistas y construyó el Estadio Nacional como lugar de espectáculos populares.
Así con este antecedente José Vasconcelos, nombrado rector de la Universidad Nacional, el 2 de octubre de 1921 dejaba ese cargo, para pasar a ocupar el de Secretario de Educación hasta el 2 de julio de 1924. Es importante aclarar que no se puede pedir más a un hombre que lo que Vasconcelos llevó a cabo desde sus cargos educativos de la época de Obregón, cambiando radicalmente el panorama cultural, y de la educación entre las nuevas generaciones mexicanas. Gracias a que Vasconcelos estuvo y creo la Secretaria de Educación Pública, fue importante, porque, con ello movió a la inteligencia de México, a hombres, niños, y a muchos jóvenes y adultos, deseosos de aprender. Las misiones culturales, que llegaron a todos los rincones de México, eran fiestas del espíritu y el resultado de esto, era la afirmación del autentico mexicano la reconstrucción de un pensamiento propio.
La reforma Constitucional fue aprobada y promulgada el 2º de Julio de 1921. El decreto de creación de la secretaría de Educación Pública data del 29 de Septiembre del mismo año. En octubre de 1921, José Vasconcelos protestó como titular de la nueva secretaría. Había seleccionado como constructor del edificio de la nueva secretaría al arquitecto Federico Méndez Rivas, quien inició la obra el 15 de Junio de 1921, obra que fue concluida en un año.
Al triunfo de la revolución, y una vez nombrado secretario de educación pública, decide trasladar la revolución del campo de lo político al terreno de la educación, como el mismo afirmaba "El destino llevaba a un filósofo a la magna tarea de educar a un pueblo" para ello era necesario despertar la conciencia del pueblo sobre la necesidad de una cultura nacional que le fuera propia al pueblo mexicano, y cuyas bases se debían encontrar en la raza, el idioma y las tradiciones.
Empezó combatiendo el analfabetismo y continuó con las reformas a la escuela primaria, comprendió que lo más urgente era enseñar al mexicano a vivir. Sus ideas impulsaron la creación de las escuelas técnicas donde se preparaban a los obreros calificados, creó la escuela agrícola para poder producir más y mejor, dignificó el arte popular mexicano, haciéndolo volver a sus raíces.
En estos tiempos de miseria filosófica y pedagogica es de aplaudirse que se hayan logrado sus publicaciónes editoriales. Sus obras son sumarias editadas en 1935 me refiero (Vasconcelos, José. Obras completas (cuatro volúmenes) libreros mexicanos, méxico, 1957 – 1959). Y a 67 años de su publicación sigue siendo vigente, en ese entonces era prioridad la transmisión del conocimiento y se demuestra la preocupación de Vasconcelos como pedagogo. También hay que mencionar nuevamente a Justo Sierra ya que ellos dos fueron promotores de cultura en nuestro país, son figuras que resisten el paso de los años y sigue siendo válidas sus obras. Un educador es un formador y es lo que el maestro José Vasconcelos logró y dejó una buena herencia a los mexicanos ya que con sus escritos, cuentos e historias tuvo esa claridad de culturizar a como diera lugar al pueblo mexicano.

Biografía

(Oaxaca, 1882 - Ciudad de México, 1959) Político, pensador y escritor mexicano. Fue el fundador del Ministerio de Educación en su país, desde el cual desarrolló una fecunda y extraordinaria labor, lo que le mereció el sobrenombre de El maestro de la juventud de América.

Licenciado en derecho por la Escuela Nacional de Jurisprudencia en 1907, presidió en 1909 el Ateneo de la Juventud, del que fue fundador. Fue partidario de la Revolución Mexicana desde sus inicios, ya que participó en el movimiento maderista como uno de los cuatro secretarios del Centro Antirreeleccionista de México. Fue designado codirector del periódico El Antirreeleccionista por Félix F. Palavicini.

En la insurrección de 1910-11 fue secretario y sustituto de Francisco Vázquez Gómez, agente confidencial de Madero en Washington, y fundador del Partido Constitucionalista Progresista. Después del golpe de Estado de Victoriano Huerta, Venustiano Carranza lo designó agente confidencial ante los gobiernos de Inglaterra y Francia, para tratar de evitar que éstos otorgaran ayuda financiera al dictador.

En 1914 fue nombrado director de la Escuela Nacional Preparatoria. Huyó luego a Estados Unidos, ya que Venustiano Carranza pretendió arrestarlo por pecar de crítico. A su regreso asistió a la Convención de Aguascalientes y desempeñó el cargo de secretario de Instrucción Pública durante dos meses en el gabinete de Eulalio Guzmán.

En 1915 se exilió en Estados Unidos. En 1920 se entrevistó con Álvaro Obregón y ofreció su apoyo al Plan de Agua Prieta, que pretendía destituir de la presidencia de la república a Venustiano Carranza, y así consolidar la candidatura presidencial del general Álvaro Obregón. Adolfo de la Huerta lo designó jefe del Departamento Universitario y de Bellas Artes. En este cargo impuso a la Universidad Nacional el actual escudo y el lema "Por mi raza hablará el espíritu".

Continuó en el cargo bajo la presidencia de Álvaro Obregón, quién lo designó titular de la Secretaría de Educación Pública al crearse esta dependencia. Desde este puesto impuso la educación popular, trajo a México educadores y artistas destacados, creó numerosas bibliotecas populares y los departamentos de Bellas Artes, Escolar y de Bibliotecas y Archivos; reorganizó la Biblioteca Nacional, dirigió un programa de publicación masiva de autores clásicos, fundó la revista El Maestro, promovió la escuela y las misiones rurales y propició la celebración de la primera Exposición del Libro. Durante su gestión se encargaron murales para decorar distintos edificios públicos a los pintores José Clemente Orozco y Diego Rivera, aunque algunos han afirmado que dichos murales tuvieron que vencer la tenaz resistencia del ministro Vasconcelos, a cuyo entender Orozco hacía "horribles caricaturas".

Después de la firma de los Tratados de Bucareli condenó el asesinato del senador Field Jurado y renunció a su puesto en la SEP. Fue candidato al gobierno de Oaxaca pero fue derrotado y optó por el exilio. En París y Madrid publicó la primera época de la revista La Antorcha (1924-25). A su regreso a México fue candidato a la Presidencia de la República por el Partido Nacional Antirreeleccionista.

Al anunciarse el triunfo del candidato oficial Pascual Ortiz Rubio, los antirreeleccionistas denunciaron el fraude electoral y Vasconcelos proclamó en Sonora el Plan de Guaymas, llamando sin éxito a un levantamiento armado. Encarcelado después de promulgar su plan, se autodesignó "única autoridad legítima" y desconoció a las autoridades federales, estatales y municipales que "burlan el voto público desde hace treinta años". Ya liberado se exilió en París, donde volvió a publicar La Antorcha. A su regreso desempeñó la dirección de la Biblioteca Nacional durante la presidencia de Manuel Ávila Camacho (1940-1946).